Este fue uno de los dos platos que hicimos hoy en el curso de Cocina de AUPA, un plato con la xarda en el mejor momento.
Normalmente cuando hago salsa mariscada siempre congelo algo. De este modo en cualquier momento puedo preparar un plato algo más apetecible.
Es una salsa que va muy bien a todo tipo de pescados y que suele gustar mucho.
XARDA MARISCADA CON GAMBONES SALTEADOS
1 diente de ajo
1 zanahoria mediana
1 cebolla
2 c/s de salsa de tomate Aceite y sal
1 copa de vino blanco
1 manojito de perejil picado
Cabezas y pieles de gambas
4 xardas sin espinas y en filetes
ELABORACION:
Ponemos en una sartén el aceite
suficiente para rehogar las verduras.
Cuando esté caliente agregamos las
cabezas de los gambones. Hacemos hasta que comiencen a doras.
Mientras se va haciendo, con una
cuchara de madera, vamos aplastando las cabezas y las pieles de las gambas,
para que aporten su sabor a la salsa.
Cortamos la cebolla, la zanahoria y
el ajo. No hace falta que el corte sea muy pequeño, porque luego lo vamos a
pasar por el pasapurés.
En primer lugar doramos el ajo y
cuando empieza a tomar color añadimos la cebolla. Cuando la cebolla empiece a
estar pochada, ponemos la zanahoria,
hacemos despacio.
Añadimos el vino blanco y dejamos
que hierva un momento, para que se mezclen todos los sabores y para que se
evapore el alcohol.
Salamos, ponemos el perejil
picado, rehogamos unos minutos y pasamos la salsa por la batidora y luego por
el chino. Reservamos.
Pedimos en la pescadería que nos
abran la xarda a la mitad, como para hacer a la espalda, y que nos quiten la
espina.
La marcamos con un cuchillo por la
piel y la hacemos a la plancha.
Retiramos el intestino a las colas
del gambón y los salteamos con un chorrito de aceite y un diente de ajo. En cuanto
cambien de color los sacamos de la sartén y los reservamos.
Ponemos la xarda en plato de
presentación, colocando entre los dos filetes unas cuantas colas de gambón.
Regamos con un poco de salsa y decoramos el plato, a nuestro gusto. Podemos
acompañar de unas patatas panadera pochadas y terminada con un espolvoreo de
perejil.
Si nos apetece más, ponemos la
salsa sobre la xarda, en una cazuela y le damos un hervor.
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