miércoles, 26 de junio de 2013
lunes, 24 de junio de 2013
TARTA DE AVELLANAS CON CREMA A LA VAINILLA Y MERMELADA DE MORAS
Me encantó esta tarta, bueno a mí y a todos los que la probaron.
Estaba mirando un libro de cocina mirando recetas y ví una tarta que me apeteció. El autor de la misma la hace con mermelada de cerezas, con una crema pastelera de vainilla y un bizcocho de avellanas.
La base de la tarta del pastelero berlinés Stephan Franz, es una pasta brisa.
No me apetecía mucho hacer pasta brisa, y tenía en casa hojaldre ya elaborado, de los que se comercializan.
No tenía demasiado tiempo para hacer la crema pastelera y la mermelada que tenía en casa era de frambuesas, de melocotón o de moras. La que más me apeteció fue la de moras.
También modifiqué el bizcocho, las cantidades, mejor dicho, porque los ingredientes son los mismos. Él le pone más cantidad de pan rallado y menos avellanas molidas y yo, por el contrario pongo más avellanas y menos pan rallado.
Al final el resultado fue una tarta totalmente distinta, pero la inspiración vino de este pastelero, del que dicen que es el mejor de Alemania
El resultado de mi tarta fue estupendo.
Aquí va la receta!
TARTA DE AVELLANAS CON CREMA A LA VAINILLA Y
MERMELADA DE MORAS
1
bote de mermelada de moras
250
gr. de hojaldre
Crema a la vainilla:
4
yemas de huevo
200
ml. de nata de repostería
100
gr. de azúcar
Una
cucharada de azúcar vainillado o una pizca de raspaduras de vainilla.
Bizcocho de avellanas:
120
gr. de avellanas molidas
70
gr. de pan rallado
90
gr. de mantequilla, a temperatura ambiente
100
gr. de azúcar
4
claras
3 yemas
de huevo
Una
pizca de canela
Ralladura
de medio limón
Pizca
de sal
Glaseado:
100
gr. de azúcar glas
Chorrito
de ron
ELABORACIÓN:
En
primer lugar estiramos el hojaldre. Lo ponemos sobre un molde de tarta,
desmontable. Con ayuda del rollo de cocina, retiramos los bordes.
A
continuación extendemos la mermelada de moras sobre la base de la tarta.
Ponemos
en un bol las yemas de huevo, las mezclamos con el azúcar y añadimos la
vainilla y la nata. Mezclamos bien. Ponemos el batido sobre la mermelada de
moras.
Para
hacer el bizcocho de avellanas, ponemos las claras a punto de nieve con la
mitad del azúcar, más o menos y un pellizco de sal.
Mezclamos
las avellanas molidas con el pan rallado y la canela molida. Reservamos.
En
un bol aparte batimos las yemas, les añadimos el resto del azúcar y seguimos
batiendo, incorporamos la mantequilla y seguimos mezclando.
Mezclamos
la mezcla de las yemas con las claras, a punto de nieve, lo hacemos con
cuidado, para que no se bajen. Lo hacemos en 2 veces, para facilitar la mezcla.
Por último ponemos las avellanas mezcladas con la canela y el pan rallado. Lo
haremos en 2 tandas.
Cuando
lo tengamos bien mezclado lo ponemos en manga pastelera con boquilla grande.
Repartimos sobre la tarta, haciendo una espiral.
Horneamos
a 180º, durante unos 40 minutos.
Para
hacer el glaseado tamizamos el azúcar glas y le vamos añadiendo muy despacio el
ron. Debe tener una textura espesa, como para el mantecado.
Cubrimos
toda la tarta con la glasa.
La receta está pensada para un molde de unos 26 cm.
CAZUELA DE CABRACHO CON ALMEJAS Y LANGOSTINOS
El cabracho auténtico es, para mí gusto, un pescado exquisito. Es un pescado que tiene la carne dura, con un intenso sabor. Es un pez de roca, muy sabroso. Uno de los platos más emblemáticos en los que utilizamos este pescado es en el pastel de cabracho. mucha gente utiliza otros pescados para hacerlo, pero con el que queda más rico, es con el autentico cabracho.
Si son pequeños los pongo guisados con patatas, a la manera de un marmitako de bonito, así está muy bueno. Si, como en esta ocasión, le añado una salsa mariscada y lo acompaño con marisco, es un placer, sobre todo para los amantes del pescado.
Os pongo la receta.
CAZUELA DE CABRACHO CON ALMEJAS Y LANGOSTINOS
½ kg. de almejas
12 langostinos grandes
4 supremas de cabracho de
unos 250 gr. cada una
150 gr. de gamba arrocera
para la salsa americana
3 c/s de salsa de tomate
1 cebolla
Parte blanca de un puerro
2 dientes de ajo grandes
1 trozo de guindilla
1 vaso de sidra natural
1 copa de vino blanco
1 copa de jerez seco
Ramito de perejil
Sal y pimienta
1 c/p de maicena
Aceite de oliva virgen
ELABORACIÓN:
Haremos una salsa americana.
Ponemos en un cazo aceite suficiente para las verduras que vamos a necesitar. Salteamos a fuego vivo las gambas
arroceras enteras, con la cáscara. Cuando estén doradas incorporamos el ajo y
la cebolla, rehogamos y añadimos la salsa de tomate. Hacemos unos minutos.
Agregamos la guindilla y dejamos hacerse hasta que se evapore el agua de las
verduras.
Una vez bien pasado
incorporamos la sidra, el vino blanco y
el jerez.
Hacemos hasta que la salsa
reduce casi a la mitad. En ese momento trituramos y colamos por el chino.
En una tartera ponemos, el
cabracho.
Cubrimos con la salsa y si es
necesario añadimos fumet.
Salpimentamos.
Si es necesario, para
engordar la salsa diluimos la cucharada
de maicena en media copa de fumet o de agua fría y lo añadimos a la
salsa para darle cuerpo.
Cocemos durante unos 15, ó 20
minutos. Cuando falten 5 minutos añadimos las almejas y los langostinos. Ponemos también una
cucharada de perejil picado.
Salpimentamos y dejamos
reposar unos minutos antes de servir.
Podemos poner 2 trozos más
pequeños de pescado, por persona, en lugar de uno grande.
jueves, 20 de junio de 2013
CHARLOTA
Esta tarta aprendí a hacerla hace un montón de años, en un Curso que hice de Pastelería para Hostelería. Aprendimos un montón de recetas y técnicas de pastelería y pastelería salada.
Luego, al cabo de los años, hice otro curso de Formación en el Gremio de Artesanos Confiteros, de Oviedo. Estuve feliz en ambos, Ya sabeis que me encanta cocinar, y la pasteleria es también mi pasión. Todaviía conservo muy buenas amigas de mi paso por ambos.
Para los que no lo sepais, la Charlota es un postre muy típico en Asturias, concretamente en Gijón. La suelo hacer en casi todos mis cursos porque gusta mucho a la gente.
La plancha de bizcocho genovés podemos hacerla nosotros o podemos comprarla, en muchas pastelerías la podeis encargar. En algunas recetas ponen bizcochos de soletilla, pero para mí gusto queda mejor con la plancha de bizcocho genovés. Os pondré próximamente la receta, para los que quieran hacer la tarta completa.
En esta ocasión el chocolate no quedó demasiado bien extendido, porque el molde era demasiado alto y me dificultaba extenderlo, así que me enfrío antes de poder hacer bien el dibujo y las raciones. Antes no hacía fotos de las recetas, porque como no las publicaba no me molestaba en hacerlas, pero la próxima vez que las haga pndré fotos nuevas.
Os pongo la receta:
CHARLOTA
Plancha de bizcocho genovés
500 ml de nata
líquida
300 gr de turrón blando
3 hojas de gelatina
¼ kg de cobertura de chocolate con leche
¼ l de nata montada
Guindas para decorar
Medio vaso de almíbar hecho a partes iguales de azúcar y agua y con un chorro de ron.
ELABORACION:
Cortamos la plancha de
bizcocho a la medida donde lo vamos a presentar, debe se un molde bajo
desmontable.
Emborrachamos el bizcocho con
almíbar caliente. Lo reservamos hasta que enfríe.
Ponemos las hojas de gelatina en agua fría. Las dejamos hasta que estén blandas.
Tendremos caliente medio vaso de la nata líquida y mezclamos la gelatina con la nata. Removemos bien. Dejamos enfriar ligeramente y mezclamos con el resto de la mezcla de nata y turrón.
Montamos la nata y el turrón
bien picado, mejor en una batidora de brazo. Con esta mezcla cubrimos la base
de bizcocho, extendiéndola con una espátula, hasta el borde del molde. La
alisamos bien para que el chocolate quede bien liso.
Disolvemos la cobertura en un
cazo al baño María, cuando está disuelta lo separamos del fuego y lo dejamos
enfriar un poco, sin dejar de remover, de esta forma se va atemperando y nos quedará con más brillo. Además de esta forma, al ponerlo sobre la nata no
resbala tanto.
Echamos la cobertura en el
centro y vamos moviendo el molde para que cubra toda la tarta.
Dejamos enfriar
en el congelador unos 15 minutos, sacamos la tarta y terminamos de decorarla
con la nata montada y la manga pastelera.
Hacemos una espiral con la nata sobre el
chocolate .
Para hacer el dibujo típico de la charlota con la punta de un
cuchillo mojada en agua caliente marcamos las raciones. Una ración la marcamos con el cuchillo desde el centro
de la tarta hacia el exterior, la siguiente desde el exterior hacia el centro y
así vamos alternando.
Desmoldamos y
adornamos con la nata montada formando espirales y guindas.